Elche de la Sierra y sus famosas alfombras de flores (que en realidad son de serrin coloreado), menos mal que no llovió que se pegaron toa la noche currandoselas.
Esta es la vista desde la ventana de mi pisico de alquiler, estoy buscando nuevo hogar donde quepamos Belen, Juana, la lavadora y yo. No se si encontraré árboles tras la ventana. Ea, siempre será el primero.